La geoestratégica se mueve rápido en Asia Occidental. El camino para la re-soberanización de Siria parece que se va despejando. Sin embargo, al país está devastado por la guerra yihadista que el Occidente Colectivo (con el Eje Anglosajón y la Red Sionista Mundial a la cabeza) le montó en su territorio, más la despiadada guerra económica que le sigue haciendo.
El artículo no nos dice gran cosa sobre el proyecto de la Gran Turquía, con expansión hacia lo que allí consideran «pueblos túrquicos» y que puede traer serias tensiones tanto con Rusia como con EE.UU. La fina línea por la que se mueve Erdogan le puede costar otro intento de golpe de Estado y de asesinato por parte del imperio estadounidense, o agenciarse demasiados enemigos en la zona. La guerra entre Armenia y Azerbaiyán es parte de ese peligroso juego. Pero si realmente se logra la estabilización con Siria, sólo EE.UU. y sus yihadistas quedarán al interior de este país árabe. A los norteamericanos cada vez les será más difícil «justificar» la ocupación y el saqueo de los recursos sirios.
El artículo, al menos, da algunas importantes pinceladas sobre algunos de estos asuntos