En la República Democrática del Congo (RDC), Ruanda, con la excusa de perseguir a los hutus (autores del genocidio ruandés) desde 1994, una vez que éstos se refugiaran en el este de la RDC, no ha dejado de provocar matanzas a través de grupos armados por el gobierno tutsi actual de Ruanda con el objetivo también de desestabilizar la RDC para sacar provecho de las inmensas riquezas naturales que hay en esa parte del país.
Los impresionantes gestos de los jugadores congoleños allá donde juegan (Copa de África última incluida) quieren gritar «cómo Ruanda nos está matando y el mundo calla”.
Cabe visibilizar, pues, esta grave situación del África Central que los medios ignoran, y donde están implicados alrededor de diez países africanos, en la que muchos habitantes de la región vienen llamando «la Guerra Mundial del Congo».
Claro, como no hay «occidentales » implicados a telón descubierto en esa matanza generalizada (que sí en quienes mueven los hilos y los apoyos en la misma), la ciudadanía Europa es profundamente ignorante de ella. Y como no se entera, millones de europeos/as quedan del todo indiferentes ante la nueva ley de deportación aprobada en Gran Bretaña. La cual ya de por sí debería suscitar todo tipo de protestas en nombre de la dignidad humana.
¿Sabéis a dónde deporta ese ‘democrático’ país a las personas migrantes? Sí, efectivamente, a Ruanda. A la que dicen considerar un territorio seguro.
Realmente, la degradación moral del Imperio Occidental es parte sustantiva de su decadencia civilizatoria.
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Por cierto, hoy es 25 de abril: ¡Viva la Revolución de los claveles!
Y viva la lucha partisana en Italia, que acabó con el régimen fascista.