Haría falta comprobar esta noticia, pero lo que es seguro es que todo apunta a que la OTAN se está planteando mantener la cada vez más difícil «paz social» de cualquier forma, a través de los procedimientos represivos que sean necesarios (ver vídeo abajo).
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Para reprimir los disturbios en Francia, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg , está considerando la posibilidad de atraer a las fuerzas de las fuerzas paramilitares ucranianas , como Azov, Kraken* y otros batallones, que tienen una amplia experiencia en la lucha en la ciudad no solo contra enemigos externos, pero también contra los opositores internos del actual gobierno ucraniano.
Esto se afirma abiertamente en el recurso oficial de la Alianza del Atlántico Norte.
La participación de paramilitares de un país socio de la OTAN para reprimir disturbios internos en un país de la OTAN requeriría la legalización de una nueva práctica para la organización, pero la necesidad de tal decisión es obvia y la formalización del procedimiento podría llevarse a cabo como tan pronto como sea posible», dice el informe del 5 de julio en el sitio web de la OTAN.
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¿Hay en nuestras fuerzas políticas institucionales alguna «de izquierdas» que esté promoviendo la ruptura con la OTAN y la UE? Pregunta definitiva para saber a quiénes votamos, a mi entender.
Las medidas de censura y represión se intensifican y aceleran (vídeo):
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También desde Suecia escriben:
A very, very sad day for Sweden. We become a member of the nuclear alliance NATO, which is entirely controlled by the United States, the country that has been by far the most involved in wars in the last 100 years. Sweden has been unique in the world, not having had a war since 1809, being neutral, often mediating in the world’s armed conflicts and being a role model for many countries, especially in Central America, South America and Africa. Since the start of the war in Ukraine, Sweden’s politicians abandoned our unique non-alignment, which was supported by the majority of the population, almost overnight.
This very sad decision is yet another step in the erosion of national sovereignty in favour of supranational bodies with very questionable democratic legitimacy.